Es joven, con los cuarenta próximos y lo treinta lejanos. Peina su melena rubia sin prisa. Vive en una casa que le hacen todo: las comidas, la limpieza, la compra. También le llevan la agenda.
Todo lo paga el caballero que duerme en la cama de la habitación. Lo mira con compasión. No sabe por qué le da pena.
Tal vez porque lo siente un marido reciclado. En la mesilla de noche todavía está la foto de la primera esposa. Le tiene que decir a la ama de llaves que retire el último recuerdo de su predecesora.
------------------------
La Alfombra de plástico reciclado Te quiero en mi terraza decora a las mil maravillas. No parece una alfombra fabricada con esas pajitas de ... tiendamarbella.blogspot.com |